A los chilenos nos encantan los casinos. Para tener una idea, es sólo cosa de ver todo el tiempo que ha sobrvivido el Casino de Viña Del Mar. Y es adecuado decir que su éxito ha sido constante desde su construcción. g2u1g
Y al ver que muchos nuevos casinos están siendo construidos a lo largo de todo el territorio nacional, podemos afirmar que el juego de azar en Chile está en su mejor momento en la historia.
Pero claro, mucha gente piensa que con tanto casino, éstos dejarán de ser el excelente negocio de antaño para pasar a ser, simplemente, un buen negocio.
Sin embargo, si la experiencia española es algún indicio de las tendencias criollas, podemos estar seguros de que los dueños de los casinos seguirán durmiendo en colchones rellenos con billetes de 100 dólares.
Y es que, según datos del Instituto Nacional de Estadística Español, los casinos han prácticamente duplicado su recaudación en los últimos seis años.
La cantidad de dinero jugado ha pasado de los €1.381,2 millones en 1999 a los €2.444,8 en 2005. Tres cuartas partes de esos fondos son apostados en las mesas de juego, mientras que los restantes se juegan en los tragamonedas.
Algo similar ocurre con las cantidades de dinero que apuesta cada jugador. En seis años, éstas han duplicado su valor, pasando de €27,73 a €55,43. También subió la cantidad de plata apostada en los tragamonedas, que crecieron de €188,51 anuales a €243,24.
En cuanto a las visitas, en dos años – 2003 – 2005 – el número de personas que entró en los casinos españoles pasó de 2.960.000 a 3.470.000.
Considerando que España es un país más grande y más rico que Chile, podemos considerar que los casinos siguen siendo mejor negocio allá que acá. Pero no nos preocupemos mucho porque, si las cosas por estos lados resultan la mitad de bien que allá, a los "pobres" propietarios de casinos chilenos les alcanzará para comer, pagar la micro y hasta el calefont el próximo invierno.
Fuente: Poker-red