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Full Tilt pareciera estar relativamente cercano a normalizar (dentro de lo posible) sus actividades, pero los líos legales no desaparecen, sobretodo para los implicados en el caso de esquiema piramidal.
Se acerca el fin del plazo para reclamar derechos sobre los bienes congelados durante el Black frinday por el Departamento de Justicia de EE.UU. y todos corren desesperados, tratando de agarrar todo lo que puedan cargar.
Chris Ferguson es uno de ellos. Su abogado presentó cuatro mociones ante la fiscalía del distrito Sur de Nueva York a favor de varias empresas del grupo Full Tilt. No son las primeras, ya que Ray Bitar ya había dado este paso de manera personal a finales de septiembre.
En resumen, quiere derecho sobre 11 cuentas bancarias de Pocket Kings, sin indicar cantidades; docenas de cuentas de orígenes diversos y depósitos que suman la cantidad de US$98 millones de dólares; cuentas y depósitos de Kolyma Corporation y Vantage Ltd. por US$100 millones y dos cuentas de Filco Ltd., sin detallar cantidades.
Todas las mociones están firmadas por Chris Ferguson, como representante de las empresas nombradas en los textos legales.
Por otra parte, Chris Ferguson añade a su defensa a un nuevo abogado, Ian J. Imrich de Los Angeles. Para poder hacerlo, necesitaba un permiso especial que permite actuar en Nueva York a abogados con licencia expedida en otro estado.
A finales de la semana pasada y de manera conjunta, las defensas de Howard Lederer, Chris Ferguson, Rafe Furst y Ray Bitar, citados en la ampliación de la demanda civil del mes de septiembre, firmaron un documento que constata el conocimiento por parte de los acusados de los cargos presentados contra ellos.
Este reconocimiento les excusa de presentarse ante el tribunal para una presentación formal de esos cargos.