El 2008, quizás pocos recuerden que el jugador de poker Ernest Scherer III (nadie demasiado conocido a nivel internacional antes del caso que le comentamos). Aquí en PokerChile informamos acerca de este caso cuando sucedió (pero el caso es tan antiguo que ni siquiera tenemos registro de la noticia) y hoy te actualizamos. 164vm
Hace aproximadamente tres años atrás, la policía local encontró a los padres de Scherer muertos en su casa, producto de numerosos golpes producidos con un bate de béisbol, además de señales de que habían sido acuchillados.
Los forenses empezaron a sospechar del hijo jugador de poker de 32 años tras encontrar una serie de hechos raros de la misma noche que ocurrió el crimen. La única evidencia clara de que Ernest sería al asesino fue un vídeo en el que se veía al jugador caminando por el barrio de los padres, lo que sirvió para condenarlo.
El jugador finalmente confesó y fue considerado culpable del asesinato de sus padres. El objetivo del asesinato (que es bastante obvio y él mismo reconoció) era quedarse con la herencia de más de un millón de dólares que le tocaba por la muerte de sus padres y así salir del agujero financiero que el poker le causó. Eso es lo que sucede cuando se juega sin control y exactamente el tipo de imagen de la que queremos desligarnos.
Tras conocer la condena, Ernest Scherer III aseguró que: “sus padres le querían y él a ellos”. Ahora se enfrenta a una condena de cadena perpetua.
Fuente: PokerNews.es